Efectos anticancerígenos del ajo
El ajo, un vegetal con potencial para combatir y prevenir el cáncer
¿Sabías que el ajo cuenta con estudios que avalan su acción, tanto preventiva como combativa, de determinados tipos de cáncer? No dejes de leer esta nota, donde vas a poder conocer más al respecto.
El ajo es uno de los vegetales medicinales por excelencia, de eso nadie tiene la menor duda. Es que, dentro de uso tradicional y casero, tiene empleos muy diversos. Va bien para ayudar a combatir una gripe, para erradicar hongos de los pies o también para los parásitos intestinales.
Pero sus usos también están ratificados por la ciencia. Y los estudios que hay con respecto a sus propiedades anticancerígenas parecen ser bastante notables. Poco a poco han ido avanzando y, las posibilidades de que el ajo ayude a prevenir (sobre todo) y combatir (algo menos) al cáncer son muchas.
El ajo, ¿un vegetal anticáncer?
Son realmente muchísimos los estudios que atestiguan que el ajo tiene potenciales anticancerígenos notables. El primero de ellos se realizó allá por 1990 en el US National Cancer Institute, donde se logró determinar que el ajo posiblemente era el vegetal con mayor potencial para prevenir tumores que existía, inclusive posibilitando el crecimiento de determinados tumores.
También en roedores se obtuvieron excelentes resultados realizados en estudios. Así es como el ajo terminó combatiendo, en estos animales a los que se les indujeron tumores químicamente, cánceres de hígado, próstata, piel, esófago, pulmones y estómago, entre otros.
La alicina, la principal responsable
Se cree que la mayor parte del potencial que tendría el ajo radica en la alicina, un compuesto sulfuroso presente en el ajo, que sería el que activaría la protección celular y otros elementos que ayudarían a prevenir los tumores, asimismo que colaboraría con la no propagación de células cancerosas.
Aún así, el ajo tendría varios tipos de componentes con propiedades anticancerígenas, además de la alicina, aunque todos ellos también derivados sulfurosos. Estos ayudarían a combatir radicales libres, y también a combatir el crecimiento de células tumorales.
Si bien hay muchos avances científicos y estudios que demuestran la acción preventiva y hasta combativa del ajo, no puede afirmarse a ciencia cierta que uno, por el sólo hecho de comer ajo o tomar suplementos que lo contienen, va a lograr a evitar estos males. Pero, que pueden ayudar, no hay duda. Al menos eso es lo que la ciencia parece decirnos de momento.
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