Cómo hacer quemadillo para la tos

Quemadillo: la receta de la abuela para la tos y las flemas

¿Tienes una tos de perros? Pues, ¡despreocúpate! Tengo la solución para tí y se llama: quemadillo, la receta de la abuela para la tos y las flemas. Te diré cómo hacer un quemadillo para la tos y te aseguro que volverás a respirar sin dificultad. ¿Me acompañas?

Qué es un quemadillo

Un quemadillo es un remedio casero, tradicional y popular, para quitar la tos, que se hace ardiendo. En efecto, esta receta de la abuela para combatir la tos, se hacía antiguamente, con una brasa de carbón, azúcar, vino y plantas o hierbas medicinales. En la actualidad, la receta original ha sufrido algunas modificaciones pero sigue siendo igual de rápida y efectiva.

Para qué sirve el quemadillo

El quemadillo es muy bueno para tratar diferentes afecciones respiratorias.

  • Para la tos. Tanto el níspero como el eucalipto son excelentes expectorantes, con efectos anticatarrales que calman y alivian la tos, eliminando las flemas.
  • Para la gripe. Sin embargo no se acaban ahí las propiedades del eucalipto, puesto que también actúa como antiséptico y febrífugo por lo que es muy bueno para aliviar los síntomas gripales.
  • Para el resfriado. Del mismo modo, si has cogido un resfriado, te ayudará a que te liberes de él mucho más pronto.
  • Para la garganta. Por otra parte, sus propiedades balsámicas y demulcentes, alivian y protegen tu garganta casi al instante.

Ahora que sabes para qué sirve el quemadillo, ¿te animarías a prepararlo? Pues entonces, ¡acompáñame!

Quemadillo: receta casera

Ingredientes

  • Azúcar morena, 3 cucharaditas
  • Cáscara de una naranja
  • Eucalipto o níspero, un puñado de hojas
  • Alcohol, vino o ron, una cucharada

Preparación

  • Coloca la cáscara de naranja en un recipiente enlozado, fraccionada en trozos pequeños.
  • Añade las hojas de eucalipto, que al igual que la cáscara de naranja, habrás dejado secar por algún tiempo.
  • Agrega el azúcar, de preferencia morena y lo más natural y pura posible.
  • Incorpora el alcohol, puede ser vino o ron si lo prefieres, pero de no tener a tu disposición estas bebidas, puedes recurrir al alcohol de uso medicinal. Ten en cuenta que el alcohol se evapora en la preparación por lo que no debes preocuparte si no lo consumes habitualmente.
  • Enciende, a falta de brasa házlo con un fósforo.
  • Deja que arda por un par de minutos o hasta que la llama se estinga.

Al arder, los aceites esenciales de la naranja y del eucalipto pasan a la infusión y de tal modo, obtienes un concentrado de sus valiosas propiedades.

Cómo se toma

  • Deja reposar unos minutos antes de tomar.
  • Filtra y a continuación bebe lentamente, de modo tal que sus valiosos componentes entren en contacto con tus vías respiratorias.
  • Házlo antes de irte a dormir y vete inmediatamente a la cama, después de tomarlo. Probablemente te haga transpirar bastante pero al día siguiente estarás como nuev@.
  • Repite tantas noches como sea necesario. Siempre antes de irte a acostar.

Quién no debe tomarlo

Si bien se trata de un remedio natural, puede ser perjudicial en determinadas circunstancias. En cualquier caso, no deberían tomarlo:

  • Niños pequeños.
  • Mujeres durante el embarazo.
  • Mujeres en plena lactancia.
  • Si tienes alergia a alguno de sus componentes.

Además, en grandes dosis, el eucalipto como otras hierbas medicinales, puede ser tóxico.

Tipos de quemadillo

A partir de la receta tradicional han surgido diferentes recetas de quemadillo, de acuerdo a los ingredientes empleados en su preparación. Las más populares son las siguientes.

  • Quemadillo de naranja. Emplea la cáscara, puede o no llevar eucalipto
  • Quemadillo de eucalipto. Se usan las hojas, no necesariamente, se hace con naranja.
  • Quemadillo de nispero. Sus hojas sustituyen a las de eucalipto.
  • Quemadillo de vino. Se utiliza vino en lugar de alcohol.
  • Quemadillo de limón. Se emplea su cáscara, en lugar de la de la naranja.
  • Quemadillo de ron. Se usa ron en sustitución del alcohol.
  • Quemadillo con miel. Reemplaza el azúcar morena por miel.

Otros remedios para la tos

Además del quemadillo existen muchos otros remedios caseros para la tos a los que puedes recurrir. A continuación encontrarás algunos de los más populares. Pero antes, no dejes de revisar el siguiente video en el que se muestran tres excelentes remedios para la tos seca. ¡Que te den alivio!

  • Zumo de piña. ¿Sabías que el zumo de piña es bueno para la tos? Pues así es. Al parecer sus propiedades no sólo se deberían a su riqueza en vitaminas, sino fundamentalmente a su contenido en bromelina, una sustancia que se destaca por sus efectos antitusivos.
  • Jarabe de rábanos. Por otra parte, puedes elaborar un jarabe casero de rábanos para combatir la tos con esta receta que te comparte María del Pilar Cancela. Es muy sencilla, sólo lleva algunos rábanos, limón y miel y sus resultados son excelentes.
  • Come chocolates. ¿Chocolates para la tos? Pues sí. Este contiene teobromina, una sustancia que pondría fin a tus ataques de tos al instante. Prueba y compruébalo por ti mism@.

¿Qué ingredientes usas en tu quemadillo para la tos?

Gráfico de la encuesta: ¿Qué ingredientes usas en tu quemadillo para la tos?

Cáscara de naranja

63/11

Cáscara de limón

46/17

Hojas de eucalipto

28/10

Hojas de níspero

44/10

Azúcar morena

27/10

Miel

32/3

Azúcar blanca

17/4

Alcohol

18/8

Vino

4/9

Ron

8/10

¿Qué otras recetas de quemadillos conoces?

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