Corteza de sauce blanco
Hipócratesusaba infusiones de corteza de sauce para sus curaciones.
El sauce y, más concretamente, la corteza del sauce blanco, se han utilizado desde épocas inmemoriales para tratar diversas afecciones del organismo, como dolores musculares o de cabeza...
El sauce y, más concretamente, la corteza del sauce blanco, se han utilizado desde épocas inmemoriales para tratar diversas afecciones del organismo, como dolores musculares o de cabeza y por tanto, estamos ante el precursor de la aspirina que la utiliza en su composición.
Las plantas han servido contra el dolor durante siglos. Desde Hipócrates hasta nuestros días se ha utilizado la corteza de sauce para los tratamientos del dolor por sus cualidades, principalmente por uno de sus principales componentes, la salicina. Por ello, el sauce ha sido protagonista en muchos remedios caseros contra el dolor y más concretamente, es el sauce blanco, el auténtico antecesor de la aspirina, medicamento con más de un siglo de vida.
Uno de sus componentes más importantes es la salicina con propiedades analgésicas, antiinflamatorias, sedativas, antiplaquetarias, antirreumáticas, antipiréticas, antigotosas y estomacales. Y ello se debe a que una vez en nuestro organismo, la salicina se convierte en ácido salicílico lo que produce estas cualidades en nuestro organismo: calmar el dolor y la inflamación.
Así, la salicina de la corteza de sauce blanco serviría para calmar el dolor de cabeza, de oídos, musculares, reumáticos, fibromialgias, dolores relacionados con la menstruación. Ahora bien, al ser un producto natural tarda mucho más en hacer efecto que la aspirina tradicional pero como ventaja también hemos de decir que no presenta ningún efecto secundario o contrario para el organismo. Dicho esto, conviene aclarar que lo lógico es que aquella persona que no puede tomar aspirina no deba tomar corteza de sauce para prevenir posibles efectos perniciosos y siempre que se haga deberá ser mediante la recomendación de un especialista y en principio, con dosis muy bajas para controlar la tolerancia al mismo.
Otra de sus cualidades son las propiedades anticoagulantes ya que impiden la formación de trombos o coágulos en el interior de las arterias o las venas por acumulación de las plaquetas. También ayuda a calmar el nerviosismo, a reducir el estrés e incluso a dormir mejor.
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