¿Sirve el té verde para la fibromialgia?
Un gran antoxidante y estimulante natural
El té verde es una de las bebidas más medicinales que existen en el mundo entero. Pero... ¿Sirve para ayudar a combatir la fibromialgia? Lee esta nota y entérate de si sus cualidades también colaboran contra este mal.
Nadie va a discutir que el té verde es uno de los mejores remedios naturales que existen en el mundo entero. Pero... ¿Sirve cuando de combatir a la fibromialgia se trata? Eso no es algo sencillo para ninguna planta y, por supuesto, tampoco lo es para el té verde. Pero lo mejor será que sigas leyendo este artículo así te enteras al detalle de para qué te puede llegar a servir.
Para qué sirve el té verde en la fibromialgia
- Para cargar tu cuerpo de antioxidantes. Es sabido que el té verde es uno de los máximos propietarios de geniales antioxidantes para tu cuerpo. Sus flavonoides y polifenoles, además su infalible EGCG, te ayudarán a que tu estado muscular y celular sea mucho mejor. Tu cuerpo se va depurando de radicales libres que entorpecen su funcionamiento. Y esto, desde ya, es bueno para la fibromialgia.
- Para mantener el sistema inmune alto. El té verde es una de esas infusiones medicinales que te ayudan a mantener la inmunidad fuerte. Es que su efecto antioxidante es superior a la vitamina C. Esto también es importante en un cuerpo que puede estar débil por efecto de la fibromialgia.
- Para mantenerte estimulado. Cansancio, fatiga, depresión, pocas ganas de hacer cosas... Todas constantes de la fibromialgia y todas cuestiones que se pueden combatir bebiendo té verde a menudo. Tiene una gran capacidad estimulante y puede levantarte de la silla en esos días en donde no tienes ganas de moverte.
Cuando tomar el té verde para la fibromialgia y cuándo no
- Si puedes tomarlo: si necesitas un poco de energía por las mañanas, si quieres cargar tu cuerpo de antioxidantes, si además necesitas adelgazar (es excelente para estos fines).
- No puedes tomarlo: si estás embarazada, si sufres de irritación a la cafeína, si eres hipertenso, si tu médico te prohibió la cafeína, si estás en período menstrual.
Preparar el té verde es muy sencillo. Siempre elige uno que sea de buena calidad y en hebras, directamente de su hoja. Infusiónalo durante dos o tres minutos con agua a unos 70°-75° centígrados. Déjalo reposar ese tiempo y consúmelo. Toma dos o tres tazas al día, todos los días, y comenzarás a notar sus efectos. Deja que se convierta en un hábito.
Otros antioxidantes con los que puedes complementar el té verde
¿Quieres conocer otros antioxidantes que puedan ayudarte a luchar contra la fibromialgia? Ya has visto que pueden ser muy buenos para mantener tu cuerpo sano y radiante, pues a su vez son considerados como fuente de juventud. Intenta con algunas de estas opciones, que puedes complementarlas con el té verde sin ningún tipo de problemas.
- Los arándanos o blueberries. Una fruta completamente antioxidante. Muy buena para tomar en zumo y genial para proteger los riñones.
- El cacao amargo. El cacao amargo puro es tremendamente antioxidante. Incluso más que el té. Pero debes elegirlo puro, sin azúcar.
- El kiwi o lulo. Una fruta híbrida que ha dado tremendos resultados. Y, desde ya, un grandioso antioxidante.
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